A mi lado, a tu lado …
Hoy como muchos otros he pensado en lo que representó mi madre, en su mirada, en como me sujetaba la mano ante mis miedos e incertidumbres, en su sonrisa, en su saber estar…
Hoy como todos los días, sentado ante mi ordenador y pensando qué transmitiros o qué nuevo informaros, no podía pasar sin escribiros a vosotras, a todas las Madres de la ciudad que tanto quiero, Don Benito, para felicitaros vuestro día (aunque si os digo la verdad, para mí son todos los días).
Estáis… siempre??? Donde quiera que permanezcamos, donde quiera que viajemos, donde quiera que trabajemos o disfrutemos, estáis siempre!!!
Dicen que nacemos para ser felices, para ser felices y para ser libres. Crecemos con esa intención, con ese objetivo, y creemos que lo vamos logrando a medida que nos vamos haciendo cada vez más prisioneros de la sociedad en la que vivimos. De pequeños caminamos a todas partes, corremos por la calle, somos incansables, somos eternos, interminables, tenemos el mundo en la palma de nuestras manos y vamos allí donde queremos, porque somos capaces, o nos creemos capaces.
Pero luego crecemos y a las limitaciones que nos imponen los demás se suman todas las que nosotros nos inventamos, porque ahí dentro, en ese microespacio que hemos creado, dentro de esa coraza imaginaria que nos rodea, nos sentimos tranquilos y seguros. No salimos, porque allí tenemos el control. No salimos, porque nos da miedo errar. No salimos, porque tememos descubrir algo más.
Hoy y cada uno de los días … “Gracias a todas las madres” por haber estado ahí, gracias por haber sido y por ser siempre mi madre, gracias por escucharme y permitirte aprender.
Gracias a todas las madres de Don Benito por ser quienes son, mujeres nobles, fuertes, luchadoras del día a día, pero sobre todo, por esas maravillosas sonrisas que en todo momento regaláis a vuestros hijos. Es esto junto con todo, lo que hará que el día de mañana, ellos sean felices y los más fuertes.
